miércoles, 13 de marzo de 2013

Comunicación y Educación Itinerarios Transversales



M en CyTE Lilia G. Torres Fernández (2010). 

 

HUERGO, Jorge. Comunicación y Educación Itinerarios Transversales, en Comunicación-Educación, coordenadas, abordajes, travesías, Universidad Central, Bogotá, 2000. (pp. 2-25).

 

En esta lectura Huergo, J. (2000), utiliza varios términos compuestos, es un texto interesante porque nos invita a reconocer el campo de Comunicación/Educación como un recorrido, como un mapa, pues en cierta forma recopila y analiza las teorías ya establecidas por otros, sobre todo en América Latina, menciona que lo importante es visualizar estos conceptos en el campo y no sólo de manera teórica. Ejemplifica que la topografía, al trazar un plano, apunta a las formas de cómo atravesar un territorio y que en Educación/Comunicación se pudieran reflejar en tres posturas: las relaciones entre las instituciones educativas y los aspectos culturales; proyección vinculada entre la educación y los medios de comunicación y los que visualizan la interacción posible entre educación y nuevas tecnologías.

 

Ahora bien, la institución escolar vinculada históricamente con la utilización del libro y de una estructura meramente lineal y con total control de contenidos, en la actualidad se encuentra detenida e incluso ha retrocedido y se ha desordenado frente a los medios masivos de comunicación e información, al grado que varios teóricos piensan que los medios proporcionan conocimientos de manera más directa y de forma masiva que la escuela, por lo que se considera que éstos son formadores de conciencias e ideologías y que la escuela está pasando por una crisis hegemónica. ¿La escuela mexicana habrá tomado conciencia de esta situación o sigue su peregrinar sin importarle que sus niños y jóvenes se encuentren perdidos y confundidos ante la disyuntiva de no saber qué les conviene atender, si a una escuela aburrida que no les enseña lo que la sociedad requiere o a los medios que resultan más atractivos en cuanto a cómo instruyen o informan los hechos acontecidos en su entorno y que en su momento les sirvan para interactuar dentro de esa sociedad? Aunque el sistema educativo, no sólo de México sino de varios países latinoamericanos han intentado “alfabetizar a sus educadores”, con relación a la penetración en las sociedades de los medios y cómo utilizarlos en beneficio y no  en perjuicio, los resultados no han sido exitosos, falta mucho terreno que barbechar.

 

Entre varias de las reflexiones expuestas acerca de las teorías expresadas sobre Educación/comunicación, me permito destacar cuando Huergo menciona: “el énfasis está puesto en los usos socioeducativos de los medios, diferenciados según los modelos pedagógicos que los enmarquen”. En mi opinión todo proceso de enseñanza y aprendizaje debe estar avalado y justificado por una situación pedagógica.

 

También nos dice que existen varias propuestas de uso de los medios, el informacional, en la que los medios simplemente sirven como instrumentos de sustento o apoyo de la enseñanza; la perspectiva funcionalista, que tiene como característica no hacer críticas sobre las circunstancias de conflicto que rodean la estructura de nuestras sociedades y, por último, las propuestas que señalan una situación pedagógica crítica, en donde se busca la reflexión, la toma de decisiones y posturas; y los medios, en este caso, son una alternativa. Alternativa que propone tomar en cuenta la mediatización, para que ésta sea activa y genere pensamientos críticos y dialógicos de los medios y no simples receptores pasivos. Existen varias y excelentes propuestas, pero la dificultad según otros, es desarrollar una pedagogía crítica de las alfabetizaciones posmodernas, para la formación de comunidades de resistencia y enfrentar lo tradicional, jerárquico y político. Nos revela en el trascurso de la lectura, un sinfín de propuestas que se han venido realizando para que en las escuelas se dé una educación en la comunicación, para beneficio de la culturalización de sus sociedades.

 

Algo que me ha quedado claro, es que la escuela ya no es el centro cultural que durante siglos se había considerado, ahora existen otros sistemas de los cuales las sociedades pueden aprender y de manera más divertida y fácil. Al volver a leer en esta lectura, prácticamente todas las teorías que se han planteado acerca de si los medios educan o no, todavía no comprendo el por qué los gobiernos, sistemas educativos, incluso instituciones privadas, no hacen caso de lo que es evidente y transparente…, llegó el momento de evolucionar de manera drástica debido a los cambios científicos y tecnológicos que han revolucionado el pensamiento y comportamiento de las grandes masas.

 

Como docente concuerdo con lo que Huergo manifiesta de manera clara y precisa: “…la escuela se ha convertido en un producto cultural, objeto de consumos diferenciados de acuerdo con la segmentación socioeconómica”, aquí está la clave, los maestros tememos, porque de “apóstoles” pasamos a ser distribuidores o facilitadores de herramientas que cultivan y no seremos más los amos y señores del “saber". Es conveniente y necesario que los profesores concienticemos que la hora del cambio ya nos rebasó, que debemos preocuparnos por analizar de qué manera las nuevas tecnologías con los medios masivos de información, pueden facilitarnos la tarea de educar a estas nuevas generaciones, que según nosotros mismos son apáticos, flojos e irresponsables. ¿Será que ellos sean así por naturaleza o porque los educadores no hemos sabido interesarlos ni motivarlos para que se preocupen en adquirir un aprendizaje que los cultive? ¿Será acaso que la mayoría de las instituciones educativas y gobiernos se niegan a un cambio por no convenir a sus intereses económicos?